Escrito por Jay Noble

Traducido por Antonio Salgado Jr.

 

La adoración de nuestro Creador se infunde en nuestro ADN. Se coloca en cada fibra de nuestro ser. Como seres hechos a la imagen de Dios, tenemos este sentido innato de que debemos adorar. Daniel Block nos dice: “Ser humano es adorar. Esta declaración es apoyada en las Escrituras, declarada en nuestros credos y evidente por la historia “. Luego agrega apoyo a esta afirmación, señalando que el Salmo 150: 6 declara:” Que todos los que tienen aliento alaban a YHWH “(su traducción). Además, el mismo principio se relaciona en la primera pregunta y respuesta del Catecismo Menor de Westminster (1647): “¿Cuál es el fin principal del hombre? El objetivo principal del hombre es glorificar a Dios y disfrutarlo para siempre “. [2] Por lo tanto, hemos llegado a comprender que nuestro propósito es glorificar a Dios por medio de su adoración.

El apóstol Pablo nos dice en su carta a la iglesia en Roma,

Porque la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de los hombres, que con su injusticia suprimen la verdad. Porque lo que se puede saber acerca de Dios es claro para ellos, porque Dios se lo mostró. Por sus atributos invisibles, a saber, su poder eterno y su naturaleza divina, se han percibido claramente, desde la creación del mundo, en las cosas hechas. Por lo tanto ellos no tienen excusa. Porque aunque conocían a Dios, no lo honraron como a Dios ni le dieron gracias, sino que se volvieron inútiles en sus pensamientos, y sus necios corazones se oscurecieron (Rom 1: 18-21). [3]

Dios nos ha programado para adorar; simplemente adoramos las cosas equivocadas muchas veces. Nuestra tendencia a causa de la depravación es atribuir valor a otras cosas que no sean Dios. Ahora el pasaje que acabamos de mencionar se refiere a personas no regeneradas, por lo que la falta de verdadera adoración a Dios reemplazada con idolatría es siempre el caso con ellos; pero ¿no es cierto que las personas regeneradas a veces pueden reemplazar la adoración verdadera con la idolatría? Entender qué es la verdadera adoración a Dios, particularmente en el contexto del Nuevo Pacto, ayudará al pueblo de Dios a permanecer comprometido y enfocado en lo que le importa a Dios y cómo su expresión es diferente ahora en la era de la iglesia de lo que era antes.

El tema de la adoración lleva consigo una gran cantidad de información de la totalidad de las Sagrada Escrituras. Por lo tanto, como indica el título de este documento, este estudio no hará más que rayar la profundidad de tal doctrina. Esta breve exploración sobre el tema definirá la adoración al Antiguo y al Nuevo Pacto y especialmente cómo el Nuevo Pacto es superior al Antiguo Pacto. También deseo hacer algunas aplicaciones para la iglesia de hoy que puedan ser útiles para obtener una mejor comprensión de la adoración el Nuevo Pacto. Esto informará nuestros corazones y nuestras mentes y por la gracia del Espíritu Santo adoraremos a Dios correctamente.

 

Definiendo Adoración

 La Adoración del Antiguo Pacto Definido

Una definición bíblica es crucial para este estudio. Dicha definición debe tener en cuenta la revelación de ambos testamentos. Según David Peterson en el NDBT, “En ninguna parte de las Escrituras se define la adoración. Pero cuando se examinan los términos bíblicos clave para la adoración en una variedad de contextos, es claro que los conceptos centrales son homenaje, servicio y reverencia “. [4] El Antiguo Testamento enfoca la adoración en un lugar específico designado por Dios. Vemos esto en el Jardín del Edén, el tabernáculo y el templo. Estos son todos los lugares que fueron la morada especial de Dios en medio de su pueblo. Sin embargo, ninguna de las actividades en estos lugares estaba honrando al Señor a menos que el resultado final fuera obediencia y alabanza en todos los aspectos de la vida. [5] Una de las cosas clave para entender sobre la definición de la adoración del Antiguo Pacto es que giraba en torno a la adoración en un “lugar”. Como veremos, este elemento de adoración a Dios cambiará con la llegada del Nuevo Pacto. El enfoque cambiará de un “lugar” a un modo basado en una “persona”.

En última instancia, la fe, la gratitud y la obediencia son los requisitos esenciales para una adoración aceptable. Y el Antiguo Testamento lo aclara. Las actividades de adoración de las naciones fuera de Israel en el Antiguo Testamento se consideran ofensivas para Dios porque son hechas por el hombre debido a la ignorancia activa sobre el verdadero carácter de Dios y lo que le agrada. [6] Para resumir, la adoración en el Antiguo Testamento es una actitud de homenaje y adoración hacia Dios como gran Rey, expresada en silencio, un simple gesto y alabanza en ofrendas y sacrificios. En definitiva, tiene todo que ver con la actitud del corazón.

 

Adoración en el Nuevo Pacto definido

Como vimos anteriormente, una respuesta adecuada de adoración hacia Dios da lugar a la obediencia y alabanza en todas las áreas de la vida. También ver esta respuesta de la adoración en el Nuevo Testamento mediante el cual el creyente con razón, responde a Dios, que pueda servir para visualizar la obra de Cristo en ellos. [7] En el sentido moderno de la palabra en el contexto de la Iglesia, “adoración” generalmente se refiere a una “reunión pública de las personas para llevar a cabo las actividades religiosas. Para los cristianos, esto significa la frecuente asamblea de la Iglesia, día a día o semana por semana, normalmente en salas de reuniones para participar  con Dios y entre sí en el nombre de Dios. “[8] pero esto significa más de lo siguiente: adoración Cristiana se define por  la revelación adicional que aclara lo que fue menos claro en el Antiguo Testamento. Por ejemplo, hay lugares en el Nuevo Testamento que nos da una mayor revelación en los temas y las circunstancias que ocurrió en el Antiguo Testamento(CF. GAL 3, 4; HEB 1, 3, 4, 5, etc.), que nos ayuda ahora al mejor interpretar y aplicar estas verdades con respeto a la adoración al Señor. Haciendo referencia a lo principal con respeto a adoración Cristiana, Block dice, “[adoración] en su forma ortodoxa es monoteísticamente comprometido, pero también misteriosamente Trinitaria, reconociendo el Dios Trino como Padre, Hijo, y Espíritu Santo.” [9] esto nos ayuda a ver doctrinalmente lo que define adoración en el Nuevo Testamento. Pero ¿y cómo se manifiesta en la iglesia corporativamente y en las vidas individuales? Dos consideraciones sobre adoración del Nuevo Pacto son cómo Dios obra en su pueblo individualmente, y en la Iglesia universal, lo que hemos llegado a conocer como el “cuerpo de Cristo” (CF. ROM 7: 4, 12: 5, 1 Corintios 6:15; 10:16; 12:12, 27, et al.).

 

Individualmente Definido

Individualmente hay importantes cosas que ocurrerion con la venida de Cristo y el Nuevo Pacto, que fue profetizado en el Antiguo Pacto. El profeta de Dios, Jeremías, nos da un vistazo espectacular en lo que Dios hará en un futuro punto de cuando esta profecía fue originalmente dado, aproximadamente al final del séptimo siglo antes de Cristo a los principios del sexto siglo antes de Cristo. Así que aproximadamente 600 años, tuvieron que pasar antes que Dios traería esto a cumplimiento, con la venida de Cristo y el derramamiento del Espíritu Santo en el día de Pentecostés después de la crucifixión y resurrección de Cristo. [10] Jeremías nos dice, “he aquí, los días vienen, declara el Señor, cuando voy a hacer un nuevo pacto con la casa de Israel y la casa de Judá … pondré mi ley dentro de ellos, y lo escribiré en sus corazones. Y seré su Dios, y serán mi pueblo “(Jer 31:31, 33). En el capítulo 32, en referencia a este Nuevo Pacto se describe como “eterno” (v. 40), el Señor reitera, … “y les daré un solo corazón y un solo camino, para que Me teman siempre, para bien de ellos y de sus hijos después de ellos. Haré con ellos un pacto eterno, de que Yo no me apartaré de ellos para hacerles bien, e infundiré Mi temor en sus corazones para que no se aparten de Mí. Me regocijaré en ellos haciéndoles bien, y ciertamente los plantaré en esta tierra, con todo Mi corazón y con toda Mi alma.”(v. 38-41).

Estos son increíbles promesas que algunos piensan principalmente se encuentran en el cumplimiento con la nación de Israel en un escenario de fin de tiempos (escatológico). Respetuosamente no estamos de acuerdo con esta afirmación. El autor del libro de hebreos cita este pasaje en explicar el nuevo y mejor pacto que ha llegado en Cristo (8: 8-13). Es importante, además, a reconocer que esta promesa de Dios se aplica no sólo para el individuo, sino también a todo el pueblo de Dios en el Nuevo Pacto,  la Iglesia.

 

Corporativamente Definido

Usted puede recordar que todos estamos hechos en la imagen de Dios con el propósito de adorar a Dios. Sin embargo, por causa de la caída en el jardín del Edén (Gen 3), nuestra naturaleza pecaminosa imputada nos lleva lejos de adoración pura y nos lleva a la idolatría. Viviendo en esta época nos permite experimentar algo verdaderamente notable en cómo Dios está obrando en su pueblo. Como hemos discutido anteriormente con el advenimiento del Nuevo Pacto, el Espíritu Santo obra en una extraordinaria manera en comparación con antes. Desde que viene a morar en todas las personas a quien ha regenerado, adoración ahora viene en línea con lo que Dios ha previsto. Hay un definitivo cambio en la disposición de la persona en quien el Espíritu Santo está obrando.  R.C. Sproul observa, … una vez que el Espíritu de Dios regenera personas, impartiendo a ellos la vida espiritual, tienen una nueva capacidad de adorar. Profundo dentro de todos los cristianos hay un hambre para encontrar una manera de expresar la adoración de Dios … no es casualidad, por lo tanto, que adorar es una de los propósitos principales de la Iglesia. Cuando el pueblo de Dios se reúnen, el objetivo es adoración . La gente suele ir a la Iglesia principalmente por la comunión, la educación cristiana, o la edificación, pero la razón principal debe ser ser unirse con otros creyentes en adoracion al Señor. [11] Este manera reformada de adorar en el Nuevo Pacto no sólo conecta el creyente en un cuerpo local de creyentes, sino también en el cuerpo de Cristo en sentido universal.

Adoración del Antiguo Pacto Ordenada, Adoración del Nuevo Pacto Superior

 La Adoración del Antiguo Pacto Ordenada

Ahora que la adoración se ha definido brevemente tanto individual como corporativamente, es importante comentar ahora la diferencia general entre los dos pactos. Eso es que el Nuevo Pacto es superior al Antiguo Pacto. El comienzo de la verdadera adoración a Dios no comienza con la dispensación del Antiguo Pacto de la nación de Israel, tampoco comienza con el llamado de Abraham. Los límites de este estudio no permiten muchos detalles, pero es crucial mencionar, como señala Noel Due, “La adoración es anterior a la creación de los seres humanos” [12]. Además, nos dice: “La decisión de Dios de crear el universo es la causa efectiva de la adoración. Él crea, y lo que surge a través de su Palabra y Espíritu como resultado de su voluntad creativa, es adoración “. [13] Así que en última instancia, el relato de la creación en sí nos fue dado para magnificar la grandeza de Dios y llevarnos a adorar a nuestro Creador como Rey, porque Él es nuestro Creador y Señor. La creación también está destinada a ser el Palacio del Templo de Dios. Desafortunadamente, esto se distorsionó con la caída del primer hombre y la mujer en el pecado y, en consecuencia, la adoración adecuada del Creador por su creación se contaminó también.

Dios en Su misericordia y gracia da una promesa significativa justo después de que la humanidad fue sumergida en el pecado y una maldición, lo que resulta es una adoración equivocada. Esta promesa vino en la forma de “la semilla” (singular) [14] de la mujer que tendría la victoria sobre el mal y Satanás mismo. Entonces, a partir de este momento, el Antiguo Testamento avanza en el tiempo a medida que Dios obra a través de la historia humana para llevar a cabo esta promesa.

A medida que la narración bíblica progresa, nos dirigimos a la nación elegida de Israel, que sería la gente que representaría a Yahweh [15] corporativamente. Dios escoge a Abraham, padre de Isaac, que es padre de Jacob, quien a su vez tiene doce hijos, que luego se convierten en las doce tribus de esta nación, que lleva el nombre de su padre, cuyo nombre fue cambiado por Dios de Jacob a Israel. A medida de que esta nación avanza en el tiempo, Dios establece lugares físicos que le servirán como lugares oficiales de adoración. Él establece un tabernáculo, y luego un templo para ser los lugares que contendrían la presencia de Dios con su pueblo del convenio. Estos lugares llegarán a conocerse como “copias” (véase Hebreos 9:24) de lo que está por venir, que es Cristo. Aquí es donde discutiremos algunos elementos clave de la adoración del templo en el Antiguo Pacto.

 

Adoración y el Templo del Antiguo Pacto

En el Antiguo Pacto, la adoración en el templo desempeñó un papel clave en la economía de Dios para adorarle. Por lo tanto, para comprender mejor lo que sucedió en este período de tiempo es para comprender mejor nuestra situación actual o dispensación. El templo en Jerusalén construido por primera vez por el rey Salomón [16] tuvo un gran significado, así como el tabernáculo le hizo a la nación de Israel desde sus comienzos en el desierto después del éxodo de Egipto . Al igual que con el tabernáculo, el templo el lugar y morada para la presencia de Dios entre su pueblo [17]. Hauser y Kellet nos recuerdan,

La presencia divina manifestada en el templo de Jerusalén tenía un papel central en la vida y adoración de Israel. El templo fue construido en el sitio que el rey David compró del Araunah el jebuseo (2 Sam 24: 18-25). El lugar se encontraba en el monte Moriah, donde Abraham casi sacrificó a Isaac (Gen 22: 1-14, 2 Cr 3: 1) … A diferencia de las sinagogas y las iglesias posteriores, que se consideraban lugares de reunión para el pueblo de Dios, el templo fue considerado principalmente como un lugar de morada para Dios. [18]

La realidad de que el templo era la morada misma de Dios entre su pueblo se desarrollará más en Nuevo Pacto, en el sentido de que el templo y todos sus detalles son sombras e imágenes de lo que está por venir. El tabernáculo y el templo sirvieron los mismos propósitos para adorar a Yahweh. Como Frame dijo, “El tabernáculo y el templo fue dedicado en gran parte a la adoración mediante los sacrificios. Pero también fueron lugares de oración (1 Reyes 8: 22-53; Isaías 56: 7; Mateo 21:13; Hechos 3: 1), de juramentos (1 Reyes 8: 22-53), cantos de alabanza. (1 Cr. 15: 16-22; 25: 1-31), y la enseñanza (Mateo 26:55, Lucas 2: 41-52, Hechos 5:21). “[19] El siguiente aspecto principal de la adoración del Antiguo Pacto es que estaba directamente relacionado con el templo, y lo que quiero explorar brevemente es el del Sacerdocio levítico, particularmente el oficio del sumo sacerdote.

Adoración y el Sumo Sacerdote en el Antiguo Pacto

 El sumo sacerdote en el AP tuvo un papel crucial en el culto del tabernáculo /en el templo a Yahweh. Fue especialmente ordenado fuera de la tribu sacerdotal de Leví iniciada por el Señor. El Señor a través de Moisés instituyó el oficio a través del hermano de Moisés, Aarón. Entonces, desde Aarón, se convirtió en una oficina hereditaria basada en la descendencia de Aarón. Chris Church define al sumo sacerdote como, “Uno a cargo de la adoración del templo (o tabernáculo). Se usan varios términos para referirse al sumo sacerdote: el sacerdote (Éxodo 31:10); el sacerdote ungido (Levítico 4: 3); el sacerdote que es el principal entre sus hermanos (Levítico 21:10); y sumo sacerdote (2 Cr. 26:20)(2 Reyes 12:10). “Además,” se requirió un grado especial de santidad del sumo sacerdote (Levítico 10: 6, 9: 21: 10-15) … uno totalmente dedicado al Señor, siempre ritualmente puro y listo para servir al Señor “. [20] Esto será extremadamente significativo a medida que el Nuevo Pacto  desarrolle este papel. A medida de que nos adentramos ahora en la importancia de la adoración del Nuevo Pacto, veremos suceder algo realmente notable, ya que tanto el templo como el oficio del sumo sacerdote encuentran la realización escatológica final en la persona de Jesucristo.

 

Nuevo Pacto y Adoración Superior

Como se mencionó anteriormente, uno de los principales factores en el Nuevo Pacto es que hay un cambio en cómo Dios trata con su pueblo y cómo lo representan. Sabemos, al examinar pasajes proféticos como Jeremías 31:31, que Dios tomará la iniciativa como siempre lo hace en Sus planes y entrará en un nuevo y mejor pacto que antes. Una característica de este pacto es el hecho de que Dios le da a su pueblo un corazón nuevo que conoce su ley y responde en obediencia.

Las profecías del NP no son exclusivas del ministerio de Jeremías, porque también vemos profecías proclamadas por medio del profeta Ezequiel, cuyo ministerio fue durante el exilio de los israelitas a Babilonia. Por lo tanto, Dios usa a Ezequiel para recordarles acerca de la promesa que le hizo a Jeremías antes de su exilio. Ezequiel, hablando en nombre de Yahweh, dice: “Haré un pacto de paz con ellos. Será un pacto eterno con ellos. Y los estableceré en su tierra y los multiplicaré, y estableceré mi santuario en medio de ellos para siempre. Mi morada estará con ellos, y yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo “(37: 26-27). Mark Rooker al comentar esto dice que Ezequiel “afirmó que Dios le dará a su pueblo un corazón nuevo y un espíritu nuevo para que puedan ser fieles y así evitar un juicio futuro (11: 17-20; 36: 26-28). El Señor establecerá un nuevo templo y una nueva adoración para la gente (capítulos 40-48) una vez que sean restaurados “. [21]

Es importante aclarar que este NP es significativamente diferente de varias maneras. No se puede romper; todos sus miembros serán hechos nuevos; y no funcionará en conjunción con el nacimiento natural, sino el nacimiento espiritual en su lugar. Michael Lawrence, refiriéndose al NP revelado por Jeremías, dice:

… en la profecía de Jeremías del Nuevo Pacto, Jeremías explícitamente dice: “No será como el pacto que hice con sus antepasados, cuando los saqué de la mano de Egipto” (Jeremías 31:32). ¿Cómo será diferente? Por un lado, será irrompible (v. 32). Por otro, todos los miembros de ese pacto serán regenerados, la ley escrita en sus corazones (v. 33). Sin embargo, otra diferencia será que el pacto no operará según las líneas naturales de nacimiento y descendencia, sino a través del nacimiento espiritual (vv 29-30). Aquí la discontinuidad entre el Nuevo Pacto y el Pacto Mosaico es enorme: un pacto de gracia, no obras; un pacto que regenera en lugar de matar; un pacto celebrado a través de un nacimiento espiritual más que natural. Y sin embargo, a pesar de toda esta discontinuidad, Jeremías tiene claro que este nuevo pacto es el cumplimiento máximo de las promesas de Dios a Israel, hechas a su antepasado Abraham. [22]

Está claro que hay un cambio definitivo en cómo Dios trata con su pueblo como individuos y corporativamente. Ahora debe aclararse aquí que el Pacto Mosaico no era un pacto de obras con respecto a la salvación. Las estipulaciones del pacto pertenecían a la nación de Israel que conserva las bendiciones temporales de Dios y la tierra de Canaán. Apuntaba al gran pacto encontrado a través del Mesías. Por lo tanto, el NP es mucho más superior que el AP.

La razón por la cual NP es superior finalmente se encuentra en la persona de Jesucristo. Él es el verdadero Templo de Dios; porque Él encarna toda la justicia de Dios; por lo tanto, el pueblo de Dios disfruta de la presencia de Dios al estar en Él, es decir, está en Cristo. En pocas palabras, la Cabeza de la iglesia (Efesios 5:23; Col. 1:18), que es Cristo, no puede separarse del Cuerpo de Cristo, que es la iglesia, el pueblo de Dios del Nuevo Pacto.

 

Adoración a través del templo / iglesia de Dios

Due nos dice: “A través de la fe en Cristo, los judíos y gentiles se convierten en miembros de un ‘hombre nuevo’, que también puede describirse como ‘un solo cuerpo’, es decir, la iglesia”. [23] Rudolph Schnackenburg hace referencia a esta verdad en el libro a los Efesios,

El nuevo ‘hombre’ es Cristo en la medida en que representa y realiza la iglesia en sí mismo. Cristo y la iglesia no son por lo tanto idénticos; la iglesia está fundada ‘en él’ y debe crecer en él (2:21; 4:13, 15) y Cristo, la Cabeza del Cuerpo (1:22; 4:15; 5:23) sigue siendo su base (2 : 30), la fuente de su crecimiento (4:16) y su vida interior a través del Espíritu (2:18, 22; 4: 4a). Al llevar a los dos grupos de judíos y gentiles anteriormente separados en su propia persona a una unidad nueva e indisoluble, establece la paz definitiva entre ellos. [24]

 

El templo de Dios en Cristo

En Juan 2: 13-21, Jesús viaja con sus discípulos a Jerusalén y visita el templo. Después de un ataque de justa ira que muestra hacia la burla y la irreverencia que se exhibía con los judíos que convertían la casa de su Padre en una casa de intercambio (v. 16). Jesús le dice a los líderes religiosos que le habían pedido que mostrara una “señal” excusando sus acciones. Esto dice: “Destruyan este templo, y en tres días lo levantaré” (v. 19). Juan nos dice en el v. 21, “él estaba hablando acerca del templo de su cuerpo”.

Jesús va a limpiar el templo, porque el nombre de Dios había sido blasfemado, ya que el templo era la morada de Dios, que es sinónimo con su nombre. Jesús tiene cero tolerancia con respeto a el nombre de Dios siendo blasfemado de esta manera o de cualquier otra manera. Due nos dice: “La acción de Jesús en la purificación del templo es la consecuencia necesaria e inevitable de su propia obediente adoracion al Padre … actuó para mantener la gloria de su nombre en el lugar donde Dios había hecho para habitar su nombre. “[25] Entonces un poco más tarde,” Jesús mismo no era nada menos que el tabernáculo / templo de Dios llevando la gloria y el nombre de Dios, en medio de las naciones “. [26]

Con el advenimiento del Mesías, el centro de culto transita de un “lugar” como se ve en el Antiguo Pacto a una “persona” en el Nuevo Pacto. La adoración del Nuevo Pacto no tiene nada que ver con los edificios, pero tiene todo que ver con la persona de Cristo. El templo judío fue visto como un “punto de encuentro” entre el cielo y la tierra. Vemos esta idea conectada con Jesús en el relato del evangelio de Juan al comienzo del capítulo 1. Cuando Natanael conoce a Jesús por primera vez, le da a Nathanael un vistazo de Sus habilidades sobrenaturales al decirle a Natanael que lo había visto sentado bajo una higuera. Natanael en una explosión de fe en Jesús lo llama “el Hijo de Dios” (v. 49). En respuesta, Jesús conecta el incidente de la “Escalera de Jacob” en el Antiguo Testamento (Génesis 28:12) con Él mismo. Jesús le dice a Natanael: “De cierto, de cierto te digo, verás el cielo abierto, y los ángeles de Dios que ascienden y que descienden sobre el Hijo del Hombre” (v. 51). Entonces, Jesús reemplaza el templo como el “punto de encuentro” entre el cielo y la tierra. Como Peterson nos recuerda,

Los evangelios de Mateo y Juan están particularmente preocupados por enfatizar que la presencia de Dios y la gloria de Dios, tan íntimamente conectados con el tabernáculo y el templo bajo el pacto mosaico, y consecuentemente en el centro de las expectativas judías para la era mesiánica, se experimentan completamente en Jesucristo. [27]

Esta es la razón por la cual la predicación y la enseñanza cristiana deben centrarse en la persona y la obra de Jesucristo. La presencia de Dios con su pueblo está en la persona de Jesucristo; porque Él es aquel en quien vemos la gloria de Dios (Juan 1:14). Él es la encarnación de la presencia de “shekinah” de Dios experimentada en el tabernáculo y templo AP.

 

Adoración a través del Gran Sumo Sacerdote de Dios

En el AP, el sumo sacerdote era el mediador entre Dios y el hombre. Él fue quien roció la sangre del cordero en el Arca del Pacto en el Día de la expiación. Él era el que se esperaba que fuera consagrado y santo a Dios. Mientras el Rey representaba al pueblo para Dios, el sumo sacerdote representaba a Dios para el pueblo. Con la encarnación, la vida, la muerte, la resurrección y la ascensión de Cristo, ha ocurrido un cambio definitivo en la forma en que se nos representa a Dios. Jesucristo es nuestro Gran Sumo Sacerdote. Ahora conocemos a Jesús como el Rey Sacerdote que es digno de nuestro devoción y adoración total.

El libro de Hebreos es crucial para ayudarnos a entender cómo Jesús es más grande que todas las cosas. Él es más grande que los ángeles (capítulo 1); mayor que Moisés (capítulo 3); y más grande que todos los sumos sacerdotes terrenales (4: 14-5: 10; 7: 1-8: 13). Estos pasajes que describen las diferencias de cómo Jesús no solo es mejor, sino también perfecto, y eterno en Su intercesión sacerdotal entre Él y nosotros.

Porque de hecho era apropiado que tuviéramos un sacerdote tan elevado, santo, inocente, sin mancha, separado de los pecadores y exaltado por encima de los cielos. Él no tiene necesidad, como esos sumos sacerdotes, de ofrecer sacrificios diariamente, primero por sus propios pecados y luego por los del pueblo, ya que él hizo esto de una vez por todas cuando se ofreció a sí mismo. Porque la ley designa a los hombres en su debilidad como sumos sacerdotes, pero la palabra del juramento, que vino después de la ley, designa a un Hijo que se hizo perfecto para siempre (Hebreos 7: 26-28).

Nuestra adoración a Dios es ahora a través del Sumo Sacerdote perfecto, nuestro Señor y Salvador Jesucristo. Ya que, “él puede salvar hasta lo sumo a los que se acercan a Dios a través de él, ya que él siempre vive para interceder por ellos” (Hebreos 7:25).

 

Aplicaciones para la adoración de hoy

En la persona de Cristo, Dios ha reconciliado a su pueblo consigo mismo. Es por Él que podemos adorar a Dios correctamente. Ahora podemos adorar a Dios, ya que Él desea ser adorado en “espíritu y verdad” (Juan 4:23). Jesús le habló a la samaritana que le estaba preguntando acerca de la adoración correcta y dijo: “Pero viene la hora, y ahora está aquí, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad, porque el Padre busca a tales personas”. Para adorarlo, Dios es espíritu, y los que lo adoran deben adorar en espíritu y en verdad “(Juan 4: 23-24). Esto significa que nuestra adoración en la iglesia se centra en Cristo, el Hijo de Dios, por el poder del Espíritu de Dios. El servicio de uno a Dios por el bien del Evangelio y nuestro Señor Jesucristo no solo se inicia, sino que también es mantenido por el Espíritu de Dios. Peterson dice con razón: “la adoración por el Espíritu es esencialmente confianza en Cristo crucificado y las implicaciones salvíficas de su muerte” [29].

Jesús como el Verbo de Dios encarnado (Juan 1: 1, 14) ha venido a revelarnos el evangelio eterno de la gracia de Dios, que lleva a los elegidos a la salvación (Juan 3:16, Hebreos 1: 1, Rom 10: 17, et.al.). Entonces, adoramos a Dios al conocer a Cristo, que es la vida eterna (Juan 17: 3). Se nos dice que crezcamos en este conocimiento: “Pero creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo” (2 Pedro 3:18). Como resultado de conocer a Cristo, nos alejamos de la idolatría del mundo y nuestros propios corazones y nos volvemos a Cristo en fe y servicio a Dios. ¡Lo adoramos!

Escuchar la Palabra de Dios proclamada es crucial para la adoración correcta. La lectura de las Escrituras está conectada a escuchar, estudiar, memorizar y meditar en la Palabra de Dios; y en el contexto del culto corporativo, la lectura de las Escrituras tiene un profundo efecto. Paul Lamey observa: “El comienzo de la teología, la exposición y la adoración es la lectura pública sostenida de la Palabra de Dios en la Iglesia” [30]. Bryan Chapell dice: “De este modo, leer la Palabra de Dios se convierte en el centro de la adoración. Dando al oidor una oportunidad para el encuentro continuo y personal con lo divino. En esencia, la Escritura es la voz de Dios encarnada para la iglesia en todas las edades. “[31] Así que es bastante simple ver que el consumo de la Palabra de Dios nos capacita para entender mejor a Cristo, lo que consecuentemente nos permite adorar mejor a Dios.

 

Conclusión

Predicar, enseñar, leer e incluso cantar la Palabra de Dios son meramente un medio para un fin. El resultado final debe ser la adoración a Dios, que es una cuestión del corazón del individuo. Si nuestros corazones no cambian hacia Dios, entonces la adoración genuina no está presente. Al hablar sobre la importante tarea de la adoración  familiar, el pastor Tedd Tripp toca esta verdad cuando dice:

La práctica del culto familiar es un medio, no un fin. Es un medio para el fin de conocer a Dios. El nombre del juego no es el culto familiar diario; es conocer a Dios, el fin es conocer a Dios. Un medio para emplear en alcanzar ese fin es el culto familiar. [32]

Peterson nos recuerda: “De varias maneras, la Biblia deja en claro que la adoración es aceptable para Dios solo si se basa en el conocimiento verdadero de Dios y de su voluntad. La adoración fuera de este marco es idólatra “. [33]

Al acercarnos a Dios con confianza, expresamos nuestra confianza en Jesús y Su obra de salvación. Confiamos en Dios diariamente, sabiendo que nuestros pecados han sido perdonados, pero sin embargo mostramos humildad en la confesión de pecado, buscando misericordia y gracia por nuestros fracasos pasados ​​y buscando ayuda de Dios para la vida continua de gloria para Él. Al adorar a Dios correctamente, demostramos que verdaderamente hemos comprendido el evangelio de la gracia de Dios. La motivación para esta adoración viene como resultado de la purificación debido a la obra perfecta de Cristo en Calvario (Hebreos 9:14) y la esperanza futura que es cierta (Hebreos 12:28). La gratitud al Señor expresa que no solo entendemos, sino que también apreciamos la gracia de Dios. ¡Esto es adoración!

 

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Tripp, tedd. Pastoreo del corazón de un niño: segunda edición. Wapwallopen, PA: Pastor de prensa, 2005.

 

 

[1] Jayson noble es marido de uno, padre de dos. Él tiene dos décadas de la Policía local y  experiencia militar en los Estados Unidos. Él es un propietario de un cafeteria. Obtuvo una maestría de reformado Bautista seminario, y enseña y predica en su Iglesia local. Él es actualmente en proceso dela plantación de una Iglesia en su ciudad natal.

[2] Daniel I. bloque, para la Gloria de Dios: recuperando una teología bíblica de culto (Grand Rapids, mi: Baker académico, 2014), 1.

[3] todas las escrituras citas en este trabajo se toman a partir de la Santa Biblia inglés versión estándar (Wheaton, Il: Biblia de las sociedad, 2001), a menos que se indique lo contrario.

[4] David G. Peterson, “Adoración ” en T. Desmond Alexander, Ed. Nuevo diccionario de teología bíblica (downers Grove, Il: intervarsity prensa, 2000), 855-856.

[5] Ibid., 856.

[6] Ibid., 73-74.

[7] Ibid., 856.

[8] Jeremy Begbie, “Adoración ” en Kevin J. vanhoozer, Ed. Diccionario de teológico interpretación de la Biblia (Grand Rapids, mi: Baker académico, 2005), 856.

[9] Block 2.

[10] esto también es cuando un cumplimiento de Joel 2: 28-32 se lleva a cabo como transmitida por el Apóstol Pedro en actos 2 (véase también GAL. 3:13). Este es el momento en que el Espíritu Santo trata de morar en el pueblo de Dios y puso la ley de Dios dentro de ellos, y la escritura que en sus corazones. El pueblo de Dios en el presente convenio se conoce como el “Iglesia” y se la manifestación física de “el cuerpo de Cristo.” Que no se apartan, porque Dios reside dentro de ellos. Este es el nuevo pacto.

[11] RC Sproul, todo el mundo es un teólogo una introducción a la teología sistemática (Sanford, fl: reforma de confianza de publicación, 2014), 274. [12] Noel debido, creado para la adoración de Génesis de a Apocalipsis  (Escocia: Cristiano se centran publicaciones, 2005), 35.

[13] Ibid.

[14] Paul escrito a las Iglesias de galacia explica este a ellos, “ahora la promete se hicieron a Abraham y sus hijos. No es decir, “y descendientes, ‘en referencia a muchos, pero en referencia a uno,” y para su descendencia, “¿quién es Cristo” (Gálatas 3:16).

[15]  define yahweh (yhwh) de esta manera: “la mayoría de Santo nombre de Dios en el AT, por lo general traducido Señor o de Jehová. El nombre también se aplica a Cristo. “Walter A. Elwell y Barry J. beitzel,” el Señor (yhwh) “(2173).

[16] durante el reinado de Rey David, Dios había dejado claro que quería fijo morada, pero no David, en lugar de su hijo Salomón sería el que se embarcan en este proyecto. John marco de contraste de la movilidad de los tabernáculo apropiadamente dice, “por el momento de Rey David, sin embargo, Dios expresado su deseo de una más permanente morada. David a sí mismo no estaba permitido para construir la nueva estructura, para él, un hombre de la guerra, había derramada mucha sangre humana. David el hijo de Salomón llevado a cabo la tarea de acuerdo con los planes de que el Espíritu de Dios había dado a David (1 chron. 28). “John M. marco, adoración en el espíritu y la verdad un refrescante estudio de los principios y prácticas de bíblica culto (phillipsburg, nj: p y R publicación, 1996), 21.

[17] esto es también conocido como el” shekinah. “El pdbs nos informa de que el” shekinah “como” la Gloria o presencia de Dios, especialmente en su Santo vivienda en Jerusalén. La palabra sekina es de hebreo, pero no bíblica plazo. Fue utilizado por los rabinos destacar la relación entre Dios y de Israel “(106).

[18] Alan J. Hauser y Earl kellet “la historia del templo” en lbd, logotipos Biblia de software, sin número de página se indica.

[19] marco, 21.

[20] Chris Iglesia, “sumo sacerdote” en hibd, 762.

[21] marca F. rooker, “el libro de Ezequiel” en el mundo y la palabra una introducción a la antiguo testamento (Nashville, tn: B y h académico, 2011), 398 [22] Michael Lawrence, teología bíblica en la vida de la Iglesia: una guía para el Ministerio (Wheaton, Il: crossway, 2010), 81.

[23] debido, 203.

[24] Rudolph Schnackenburg, la epístola a los Efesios (Edimburgo, Escocia: T y T Clark Ltd, 1991), 115.

[25] debido, 129.

[26] Ibid., 131.

[27] David G. Peterson, la participación con Dios una teología bíblica de culto (downers Grove, Il: intervarsity prensa), 101.

[28] debido, 199-200.

[29] Peterson, la participación con Dios, 187.

[30] Paul lamey, “la lectura de la escritura,” los expositores blog, 12 de abril, 2016, acceso a 12 de abril, 2016, http://www.expositors.org/blog/the-reading-of-scripture/.

[31] Bryan chapell, Cristo centrada en la adoración (Grand Rapids, mi: Baker académico, 2009), 220.

[32] tedd Tripp, pastoreo del corazón de un niño, segunda edición (wapwallopen, PA: Pastor de prensa, 2005), 53.

[33] Peterson, nueva diccionario de teología bíblica, 857.